El Obispado de Cuenca recibirá el próximo viernes a las 13 horas el premio Bombero de Oro que otorga el Ayuntamiento de Cuenca a personas, entidades e instituciones que se distinguen por su implicación en materia de prevención de incendios. Así lo ha anunciado hoy el alcalde de Cuenca, Francisco Javier Pulido, en el transcurso del simulacro de incendio que ha tenido lugar en el Hotel Torremangana en el marco de la Semana de Prevención de Incendios.
Francisco Javier Pulido ha destacado la preocupación que el Obispado ha tenido siempre en esta materia y la colaboración que el Ayuntamiento ha encontrado en la instalación de sistemas de prevención en las distintas iglesias de la capital y en la elaboración de los planes de autoprotección.
Por otro lado el alcalde ha valorado como muy positivo el resultado del simulacro de incendios en el que los efectivos de bomberos han tenido que hacer uso de la autoescala para acceder a un piso en el que supuestamente se encontraba atrapado uno de los clientes.
Pulido ha señalado que era importante hacer un simulacro de estas características en un establecimiento hotelero, uno de los pilares básicos de nuestra economía, y ha agradecido al director, José Manuel Abascal, su colaboración y la de todo su personal.
De igual forma, Abascal ha agradecido al Ayuntamiento la elección de su hotel y ha destacado la importancia de hacer este tipo de ejercicios prácticos que les sirven para aprender cómo tienen que actuar en un incendio.
El simulacro ha dado comienzo sobre las 11,15 horas y ha contado con la participación de efectivos de bomberos y protección civil, policía local, policía nacional y servicios sanitarios del SESCAM.