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El Salón de Sesiones del Ayuntamiento de Cuenca ha acogido hoy la firma de un convenio para el estudio de evaluación previa y viabilidad de una planta de producción de biocarbón y pellets de madera, acuerdo que ha sido rubricado por Juan Ávila en calidad de alcalde del Ayuntamiento de Cuenca y presidente de la Fábrica Municipal de Maderas, Benjamín Barambio Ruiz en representación de Urbaser, Antonio Cavallé Aránega en representación de la compañía Aplicaciones de Industrias Renovables y Juan Jacobo Sartorius Lavalle Cobo en representación de las empresas Binnova Consultores de Innovación, Bat Trading Co y Sartorius and Hart-Pallavicini.

El objetivo que se persigue, según señala el propio acuerdo, es “realizar el estudio para evaluación previa, viabilidad y forma de puesta en marcha de una actividad económica de interés general consistente en una planta de producción de biocarbón y pellets de madera, cuya materia prima sería suministrada por los residuos procedentes de los aprovechamientos forestales, restos de podas y limpieza de jardines públicos, y de la selección de los residuos sólidos urbanos”.

Fue ayer cuando el primer edil conquense anunció la firma de este convenio, “que finalizará cuando se cumplan una serie de hitos, para lo cual nos damos doce meses y que entonces podamos empezar la construcción de esa planta”, ha explicado hoy. El primero de ellos tiene que ver con poner a disposición de la entidad que va a construir la planta el terreno, el cual “ya existe y es propiedad de la Fábrica de Maderas del Ayuntamiento de Cuenca, y que está junto a sus instalaciones”.

Asimismo, ha continuado Ávila, “tenemos que conseguir los permisos administrativos necesarios, que son fundamentalmente de índole urbanística y que dependen del Ayuntamiento de Cuenca, y de índole ambiental y que dependen del Gobierno regional”. Sobre este punto ha recordado que ya hubo un proyecto en esos mismos terrenos para la producción de energía eléctrica que no llegó a salir adelante y cuya materia prima es la misma que en el caso actual, el cual “ya tuvo Declaración de Impacto Ambiental favorable por parte de la Junta de Comunidades”.

Dos hitos más que es necesario cumplir son “organizar todos los trabajos de recogida de biomasa en las 53.000 hectáreas de monte público del Ayuntamiento de Cuenca y conseguir la autorización de ADIF para construir una estación de carga justo donde se va a situar la planta de biocarbón y pellet”. El objetivo que se persigue con este último punto es que el producto final salga de la planta en ferrocarril.

Tal y como se adelantó ayer, este proyecto nace con la pretensión de producir 30.000 toneladas de biocarbón y 15.000 toneladas de pellet, además de que inicialmente se crearían alrededor de 80 puestos de trabajo y esto “sin contar los que se generarían mientras se construye la planta”. A esto hay que sumar, según ha informado Ávila, que “vamos a hablar con los Ayuntamientos del resto de la Serranía de Cuenca para, en su momento, decirles que también pueden participar en este proyecto”.

El alcalde conquense ha destacado que “si se cumplen todos los hitos podrá financiarse la inversión sin ningún problema, además de que contamos con los medios técnicos y tecnológicos necesarios para construir la planta”. En este punto es importante enfatizar que “el Ayuntamiento no pone ni un euro en este proyecto y lo que hace es facilitar el suelo a través de la Fábrica de Maderas, pues la inversión es privada al cien por cien”.

Para terminar su intervención, Ávila ha explicado la participación del resto de las partes implicadas en el convenio, siendo el caso de Urbaser que “gestiona la planta de tratamiento de residuos de Cuenca y una parte no pequeña de ellos son madera, por lo que ahí también hay biomasa que debe servir de materia prima”.

Por su parte, la compañía Aplicaciones de Industrias Renovables es una empresa especializada en el desarrollo de proyectos de eficiencia energética y activos energéticos con capacidad para la promoción, construcción y gestión de este tipo de proyectos.

Finalmente, las tres sociedades restantes son Binnova Consultores de Innovación, que posee la tecnología necesaria para la conversión de residuos forestales y otros residuos vegetales en biocarbón; Bat Trading Co, que cuenta con los recursos necesarios para la comercialización de los productos energéticos resultantes de la nueva actividad; y Sartoriuis and Hart-Pallavicini, empresa especializada en la estructuración de la financiación para el lanzamiento de nuevas empresas y proyectos.



(SE ADJUNTA A LA NOTICIA EL CONVENIO FIRMADO)