El Ayuntamiento de Cuenca reconocerá la labor del Cabildo Catedralicio con uno de los tres reconocimientos que realiza a personas e instituciones que han jugado un papel destacado en San Mateo y que se entregará en el acto del pregón de esta festividad el próximo día 18 de septiembre.
El Consistorio local, quiere de este modo reconocer la labor del Cabildo Catedralicio por su papel destacado en la salvaguardia de las fiestas de San Mateo que son historia y tradición de la ciudad que se remonta a la fecha de la conquista en 1177. Entre ellas, las de custodiar el pendón de Alfonso VIII, símbolo de la conquista de la ciudad y de la historia de Cuenca.
Para el alcalde, Ángel Mariscal: “El traslado del pendón es uno de los actos centrales, más emblemáticos y solemnes de la festividad de San Mateo. Hemos valorado positivamente, la cesión que el Cabildo hace al Consistorio del pendón original desde hace ya 4 años para exponerlo al público en la Sala de espera de Alcaldía durante las fiestas mateas”.
El Cabildo Catedralicio
El cabildo fue creado en época precarolina y tiene su origen en el antiguo ‘Presbyterium’ o grupo de clérigos con vida y bienes en común que asistían al obispo en el ejercicio del servicio divino y en la administración de los bienes de su casa.
Instaurada la diócesis conquense por el Papa Lucio III en el año 1182, muy pronto, el obispo Juan Yáñez, recibe autorización pontificia, el 15 de mayo del siguiente año, para que proceda a la constitución de su cabildo y en julio de ese año nombra los 16 primeros canónigos. El cabildo, con el paso del tiempo, comenzó a tener personalidad jurídica propia e independencia económica. Estas realidades configuraron la institución capitular de la catedral con una definición propia y de manera autónoma.
En la actualidad, se define al cabildo como un colegio de sacerdotes con personalidad jurídica, colegial y pública. Tal y como figura en la normativa vigente, la finalidad propia y específica del cabildo es celebrar las funciones litúrgicas más solemnes y cumplir con aquellos oficios que el derecho o el obispo diocesano le encomienden.