El Ayuntamiento de Cuenca va a afrontar una reestructuración de la limpieza viaria de la ciudad para ahorrar 364.310,30 euros anuales en los contratos que tiene suscrito con las empresas que prestan el servicio. El objetivo de esta medida es garantizar la prestación de un servicio que tiene un coste que supera ampliamente los dos millones de euros, lo que en la actual situación económica del Consistorio es inabordable.
Esta reestructuración va a consistir en la renuncia a una serie de mejoras que ofertaron en su día las adjudicatarias, como las instalaciones de paneles informativos en determinados puntos de la ciudad o la compra de contenedores de sal.
Por otra parte, la limpieza viaria, que actualmente se lleva a cabo de forma diaria durante los días laborables, pasará a realizarse en días alternos, es decir, un día sí y otro no, en San Antonio, Reyes Católicos, Santa Ana, Avenida del Mediterráneo y varias calles de Villa Román, El Sargal, Antonio Maura, Paseo del Ferrocarril, Álvaro de Luna, Pozo de las Nieves, San José y Villa Luz. Estas frecuencias ya se estaban aplicando en Tiradores, San Antón, Cañadillas, Alameda, Buenavista o la Universidad, donde las calles se limpian en días alternos porque así se recoge en el contrato. No se modificarán las frecuencias en aquellas zonas especialmente pobladas, con una intensa actividad comercial o de interés turísticos, como es el Casco Antiguo o Carretería.
Esta decisión se ha tomado atendiendo a criterios técnicos, como es la organización de la limpieza viaria que se recoge en el propio pliego de condiciones de técnicas del servicio y que distingue entre cuatro niveles de necesidad de limpieza, en función de la población, el tráfico rodado, el tráfico peatonal, el emplazamiento de recursos públicos (hospitales, centros médicos, escuelas, etc.), el interés turístico o la actividad comercial de cada zona.
La limpieza, tarea de todos
El concejal responsable del Servicio de Limpieza, Salvador Barambio, considera que la medida, “no tiene que afectar a la limpieza de la capital si los ciudadanos asumen su responsabilidad en esta tarea y entienden que la limpieza de la ciudad es cosa de todos”. “Aunque limpiemos a diario, la ciudad estará sucia si no entendemos que todos tenemos que hacer el esfuerzo de mantener nuestras calles en un buen estado”, ha señalado Barambio, quien recuerda además que en muchas ciudades españolas se están aplicando esquemas de trabajo similares.
En este punto, ha puesto como ejemplo la presencia de excrementos de perros en la vía pública, y ha dicho que “es responsabilidad de los dueños de los animales retirarlos, porque el Ayuntamiento tiene la obligación de limpiar, pero no puede tener un operario esperando a que cada uno de los 9.000 perros que hay que Cuenca salga a dar un paseo y haga sus necesidades”.
El concejal ha querido recalcar una vez más que estos cambios se acuerdan “para poder asegurar que el Ayuntamiento va a poder seguir prestando el servicio”,
Finalmente, ha asegurado que el Equipo de Gobierno tiene un compromiso con el empleo y ha asegurado que esta reestructuración se ha abordado procurando que no supongan la pérdida de empleos, aunque se trata de cambios que afectan a las empresas adjudicatarias del servicio, no a empleados municipales.